Yo:
Niall, me tienes que contar algo.
Niall:
Vale-Suspiró y me miró fijamente a los ojos. Literalmente, morí.-
Hace como diez años, fui a un campamento, y conocí a cuatro chicos,
Zayn, Liam, Harry y Lou. Nos hicimos grandes amigos, y nuestros
padres también. Después de unos meses, mis padres, mi hermano y yo,
nos mudamos de Irlanda hasta Londres, y en la misma urbanización,
encontré de nuevo a mis amigos del campamento. Los cinco tenemos una
gran cosa en común, que nos encanta cantar. Hace como tres años,
formamos un grupo de música, One Direction a petición de Harry, y
claro, nos hicimos muy populares. Liam empezó a liarse con
cualquiera, y empezó a fumar. Zayn ya fumaba de antes, pero se
volvió, no se, cambió su forma de ser. Lou siguió como siempre. Y
Harry, él tampoco cambió, siempre ha sido un mujeriego. Nos
separamos, yo me fui con Zayn y Liam, y me convertí en uno de ellos,
empecé a fumar, empecé a liarme con todas las que podía... Y Harry
y Lou se quedaron juntos, y siguieron como siempre. Cuando me juntaba
con Zayn y Liam, conocí un día a Amy, y me empezó a gustar.
Empezamos a salir, y la dejé, como hice antes con un montón de
chicas. Nosotros salíamos un mes como máximo con una tía, pero nos
liábamos con más de veinte a la vez. Pero cuando dejé a Amy, algo
cambió en mi, pasé algunos recreos solo, pensando. Observaba a
Louis con su novia, Eleanor, eran muy felices y llevaban como año y
medio saliendo, y después Harry, que buscaba a su princesa pero
seguía sin encontrarla. Y tuve una pequeña charla con April, y ella
fue quién me abrió los ojos. Dejé de fumar, de beber mucho
alcohol, y de liarme con todas, y así fue como cambié, porque así,
no tenía futuro, algún día se me quitaría lo de cantar, ¿no?
Yo:
Lo siento Nialler. Wow, lo siento mucho.
Niall:
No te preocupes, tu no tienes nada que ver.
Yo:
¿Y todavía te gusta Amy?
Niall:
No, la olvidé. Ahora no me gusta nadie.-Me sonrió.- ¿Y qué hay de
tu pasado?
Yo:
Lo mío también es algo triste... Siempre he sido una persona
cerrada, me cuesta mucho hacer amigos. Holly Ross y yo nos conocimos
hace un montón de tiempo. Nuestros padres eran muy amigos, y desde
que tengo uso de razón, Holly y yo siempre hemos estado juntas,
eramos como hermanas. Ella era mi única amiga, la única capaz de
soportar mis cambios de humor y mi personalidad. Hace algún tiempo,
quedamos para hablar en el parque que hay cerca de mi casa, la noté
un poco extraña, aunque en realidad, desde hace tiempo era
diferente. Ese mismo día, en ese mismo parque, me llamaron. ¿Sabes
qué me dijeron? Que mis padres habían muerto. ¿Te lo puedes creer?
Mi vida se derrumbó, lo que más amaba en el mundo, se había ido,
para no volver. Me fui llorando a mi casa, y Holly, se quedó en el
parque. Días después, vino a verme a mi casa, me preguntó que qué
me había pasado, y yo se lo conté todo. ¿Sabes qué hizo? Pasó de
mi, me dejó de hablar. ¿Por qué? Ni idea, lo único que se, es que
me dejó tirada, cuando realmente necesitaba un hombro en el que
llorar. Alquilamos mi casa y Drew y yo nos mudamos con una tía de
New York. Y cuando mi hermano terminó la carrera, buscó trabajo
aquí, y volvimos a Londres. Y eso es todo Nialler, mi historia al
completo. Esta mañana, cuando me contaste todo lo que te dijeron de
mi, te dije que todo es verdad. Me margino y soy muy borde. Y si te
quieres ir como si no me hubieses conocido, adiós. Eso es normal
para mi. Todos se ríen porque mis padres murieron, pero yo no lo
encuentro lógico. ¿Qué tiene de divertido meterse con alguien que
lo ha pasado tan mal? ¿Por qué no me dejan seguir adelante con mi
vida? Siempre quise ser de ese tipo de personas, a las que no le
importan lo que digan de ellas, pero no creo que lo sea...-Me limpié
algunas lágrimas, y Niall me abrazó.- Solo quiero que algo bueno
pase en mi vida de mierda. Quiero tener un primer amor, un primer
beso, un novio que me quiera, amigos que me acepten tal y como soy,
¿tanto pido? Que no es que esté pidiendo un millón de libras, solo
quiero que me quieran, ¿tan difícil es quererme? Se que soy
cabezota, borde, bipolar, irónica, sarcástica, pero no creo que eso
sea tan malo. Parece que tengo una esfera de mala suerte a mi
alrededor que hace que todas las personas que quiero, se alejen de
mi.
Niall:
Ya pasó Emily. De todo se sale, ¿vale? April, Marie, Amy, Natalie,
Logan, Daniel y Chad, a todos les has caído muy bien. Me han dicho
que eres muy maja, y que somos todos juntos un grupo. Ya tienes gente
que te quiere. Por Holly no te preocupes, porque nadie insulta a mis
amigos, y menos ella. Y lo demás, todo tiene solución, y yo te voy
a ayudar a encontrarla.
Yo:
¿Me ayudarás a encontrar una solución para todo?
Niall:
Para todo lo que necesites, te voy a ayudar siempre.
Yo:
¿Y qué hay de ese primer beso?
Narra
Emily: Niall me miró fijamente a los ojos, pude notar sorpresa en
ellos. Bajé un poco la mirada, rompiendo el contacto que había
entre sus ojos y los míos. Me fijé en sus labios, una sonrisa se
extendía en ellos. Eso me confortó, me sorprendió un poco que
sonriera, porque eso significa que la idea le gustó. Volvió a fijar
la mirada en su comida, vale, eso me decepcionó. La idea era que me
besara, no que me ignorara...El resto de la comida estuvimos en
silencio, ¿de qué hablamos? La he cagado diciéndole que me besara,
¡nos hemos conocido hoy! Pensará que soy una puta. Dios, soy una
gilipollas. Cuando terminé la hamburguesa que había pedido, aparté
un poco la bandeja, apoyé los codos sobre la mesa, y después la
cara sobre mis manos, mirando fijamente a Niall comiendo. No se como
puede existir algo tan precioso, ese pelo tan perfectamente peinado,
esos ojos azules como el mar en los que cualquiera se podría perder,
esa sonrisa tan contagiosa, ese todo... Puff, es perfecto. Cuando se
terminó su comida, me miró y rápidamente apartó su mirada, se
puso rojito, es un tierno... Se levantó a la mesa, y fue a la caja a
pagar. Después volvió a sentarse en la mesa. Miró mi cartucho de
patatas, y yo se lo extendí. El lo cogió, me susurró un
gracias,
les echó mayonesa y empezó a comérselas, mientras yo bebía un
poco de mi Coca-Cola.
-Niall:
¿Terminaste?
-Yo:
Sí, no, bueno... No terminé la Coca-Cola.
-Niall:
Bueno, me refería a la comida. La Coca-Cola llévatela si quieres.
-Yo:
Pero no podremos entrar en las tiendas.
-Niall:
Damos una vuelta por el centro comercial, y cuando la termines,
entramos en las tiendas.-Dijo mientras me miraba a los ojos, me
mató.-
-Yo:
Sí, claro, gracias.-Dije algo nerviosa.- ¿Vamos?
Narra
Emily: Nos levantamos los dos de la mesa, y salimos de Nando's.
Andamos durante unos tres minutos, hasta que llegamos a una fuente
que había en todo el centro del centro comercial. Nos sentamos los
dos en el borde, había pequeños peces dentro, y eso me hizo gracia.
Metí la mano en el agua, bajo la atenta mirada de Niall, y como si
fuese un pequeño trozo de pan, todos los peces se situaron alrededor
de mi mano. Uno de color anaranjado, empezó a pegarme mordiscos. No
dolían, a ver, son peces. Más bien hacían cosquillas, y yo empecé
a reírme, contagiando a Niall a mi paso. Después de un rato paramos
los dos de reírnos, ya no se ni por qué empezamos... Nos levantamos
de la fuente, tiré el vaso a una papelera, y entramos en una tienda.
No me fijé en el nombre, pero me enamoré de ella. Había un montón
de ropa, vaqueros de colores, sudaderas, vestidos, de todo. Y también
había una parte para chicos. Me fui a la parte de las sudaderas,
cogí algunas de mi talla, y me metí en el probador. Cuando terminé
de probarme lo que había cogido, cogí dos que eran las que me
habían gustado, y fui a pagarlas al mostrador. Le di la bolsa a la
dependienta, para que la guardara mientras yo miraba más ropa. Me
fijé en la parte de los chicos, vi a Niall saliendo del probador con
un suéter celeste y unos vaqueros negros, estaba guapísimo.
Sonriendo, me acerqué a el, sigo con la misma teoría, ¿cómo puede
ser tan precioso?
-Niall:
¿Qué te parece?-Dio una vuelta sobre sí mismo.-
-Yo:
Te queda muy bien, Nialler. Estás muy guapo.
-Niall:
Cuando venía con Amy a esta tienda, ella elegía un conjunto para
mi, y yo otro para ella. ¿Quieres que lo hagamos?
-Yo:
Claro, será divertido y descubriré tus gustos.-Le sonreí.-
-Niall:
Lo mismo digo.-Me sonrió y se dio la vuelta, para meterse en el
probador.- Esto me lo llevo.-Dijo desde dentro. Salió con su ropa y
me sonrió.- Te dejo trabajar, señorita Horan.
Narra
Emily: Su sonrisa cambió, ahora era una pícara, menos tierna. Eso
me pilló de improvisto, ¿señorita Horan? Seguí mirándolo
mientras se alejaba de mi. Hizo lo mismo que yo, fue al mostrador,
pagó su conjunto, y le dio la bolsa a la dependienta. La tía se
quedó mirándolo fijamente mientras Niall caminaba, pero será puta.
Tosí muy fuerte y me miró con una gran cara de asco, a lo que yo me
reí interiormente. Me di la vuelta y me puse a buscar ropa para
Niall. Al rato me di cuenta de un pequeño inconveniente, las tallas.
Lo miré, estaba andando hacia aquí, empecé a acercarme a él, nos
encontramos en frente del mostrador.
-Yo:
Nialler, no se tus tallas.
-Niall:
Ni yo las tuyas tampoco...
-Yo:
Tengo una idea, yo te elijo el conjunto, te lo pruebas, y después me
toca a mí, así es mejor...
-Niall:
Sí, ¿y quién empieza? A mi me da igual.
-Yo:
Pues elige tu primero, si tenemos tiempo.
Narra
Niall: Fui escogiéndole conjuntos, yo decía la prenda y ella
buscaba su talla. Le di el primer conjunto, un vestido negro, que en
su cuerpo, puff. A ver, Emily tiene muy buen cuerpo, es muy guapa y
además es agradable, lo tiene todo. Salió del probador y...valla,
realmente le queda muy bien. Me miró graciosa, normal, mi cara será
épica. Sonreí ampliamente, cosa que ella imitó, le di el siguiente
conjunto, y se volvió a meter en el probador. Así pasamos toda la
tarde, eligiendo conjuntos mutuamente en diferentes tiendas, hasta
que llegó la hora de marcharse...